¿Se es o no Apolítico?

ParteI. El Demousuario: Por un Nuevo Ideal de Ciudadano Usuario de la Democracia

Me preguntó en una entrevista radial la abogado Mayerling Cantor: ¿Puede existir una ciudad sin ciudadanos?

La respuesta no la tenía en lo inmediato y eso provocó un verdadero dilema en mi mente, entre otras cosas porque no tenía el tiempo necesario para reflexionarla. Y de pronto mi mente me ordenó rápidamente: ¡Sí! "Ciudad Gótica" de Batman...

La democracia es el poder en el pueblo y para el pueblo, porque etimológicamente hablando viene del griego Demos: pueblo y Kratos: poder. Pero para los mismos griegos esto no era tan simple, por lo menos en su sentido práctico.

Un pueblo es la conglomeración de personas ubicadas en un espacio geográfico o territorial común, con historias y costumbres afines. Luego, esta condición de pueblo no les hace ciudadanos per se, porque para ser ciudadanos en una democracia se debe cumplir con algunos requisitos indispensables: Como tener condición legal, es decir nacionalidad, y también ser sujeto de derecho. Yo agregaría un tercero, más político que jurídico: involucrarse voluntariamente en los asuntos públicos del Estado. Porque según el General griego Perícles, de la guerra del Peloponeso, en su discurso a los caídos dijo: "Un ciudadano es aquella persona capaz de involucrarse en los asuntos públicos del Estado de manera voluntaria"

Cuando respondí a la polémica pregunta con “Ciudad Gótica”, vi con claridad el asunto: ¡Una revelación dirían los profetas! Porque el gran problema de las democracias es la apatía de sus ciudadanos con respecto a la política, de hecho es muy común escuchar decir "yo soy apolítico". Primera consideración: No se puede afirmar esto porque el ser humano, según Aristóteles, es un Zoon Politikón, que del griego se traduce como "un animal político". De modo que por naturaleza somos seres políticos y no apolíticos, en la medida que vivimos en sociedad como seres gregarios y necesitamos organizarnos política y jurídicamente.

En segundo lugar y no menos importante, está el hecho que si la democracia es el poder del pueblo y por el pueblo, es una contracción o aberración afirmar aquella condición apolítica y de paso asumir una actitud de apatía con respecto a los asuntos públicos. Platón dijo: Desentenderse de la política hace que nos gobiernen los peores".

Las democracias representativas por defecto generaron pueblos apáticos y conformistas; que se acostumbraron que el Estado y los partidos políticos les resolvieran todo. De modo que la consecuencia más triste es que tenemos democracias con pueblo, pero no estoy seguro si con ciudadanos, mientras siga observándolo, lo de apolítico, seguiré pensando que una persona dentro de la democracia pasará de pueblo a la condición de ciudadano solo en la medida que se involucre en los asuntos públicos del Estado.

Entonces ser pueblo en una democracia no es ser ciudadano, la condición de ciudadano se gana en la medida que nos ocupemos de nuestros propios asuntos, porque eso significa lo que expresó el mismo Abraham Lincoln: "El poder del pueblo, por el pueblo y para el pueblo".

Ah lo olvidaba, y ¿Por qué Ciudad Gótica?

En la películas de Batman se refleja una ciudad dominada por la corrupción y la falta de respeto a las leyes. Deja claro la película, que el principal responsable de la corrupción son sus habitantes, por lo que Batman representa una especie de héroe que encarna las tres ramas del poder público.

¿Cree usted que en un país democrático, donde el pueblo es apolítico, podemos llamarnos ciudadanos? Y, ¿Será que la apatía por la política nos convierte en cómplices de la corrupción por la ausencia de sanción colectiva?

Pues si usted cree que es así, entonces vivimos nuestra propia Ciudad Gótica venezolana...

En la próxima entrega hablaremos sobre el DEMOUSUARIO.

Saludos estimados lectores.



LUISCORONADOP@GMAIL.COM