Concienciación sobre el Autismo vs Legislación

El pasado 2 de abril, se celebró el Día Mundial de Concienciación sobre el Autismo, cuyo lema este año se centra en la contribución de las personas con autismo en el hogar, el trabajo, las artes y la formulación de políticas, la Asamblea Nacional, el día 30 de marzo de este año sancionó la Ley para la Atención Integral a las Personas con Trastorno del Espectro Autista (TEA), que tiene por objeto, garantizar y promover el diagnóstico integral temprano y oportuno de las personas con la referida condición, solo queda por parte del Ejecutivo Nacional su promulgación y posterior publicación en Gaceta.

Es aplaudible esta iniciativa legislativa, en virtud que abogamos por la defensa de los derechos humanos de la infancia de nuestro país aunado al hecho, que el 1° de abril de 2023, se celebró el vigésimo tercero (23°) aniversario de la Ley Orgánica para la Protección de Niños, Niñas y Adolescentes, colocándonos de nuevo en países de vanguardia en materia de infancia legislativa, al ser el cuarto parlamento de Latinoamérica, en discutir acerca de esta Ley relacionada al autismo.

En la referida ley sancionada, encontramos una gama de artículos donde se fomenta la conciencia, formación y capacitación a las familias, comunidades e instituciones, sobre las condiciones de las personas con el mencionado trastorno, incluyendo la participación del Estado en la atención y desarrollo de los diferentes planes y programas dirigidos a estos ciudadanos.

La ley adicionalmente, busca garantizar la protección de los mismos, en situación de abuso, explotación sexual, esclavitud, servidumbre y trabajo forzoso, así como a su integridad personal y cualquier vulneración o violación de sus derechos, igualmente establece el derecho a su protección, atención integral y a ser informadas y formadas sobre la materia.

Uno de los aspectos relevantes y exigidos por las distintas organizaciones que acompañaron esta revisión legislativa, fue el vinculado al derecho a la educación, la cual dispone que toda persona con la mencionada condición, tiene derecho a recibir una educación adecuada, permanente y de calidad, en todos los niveles y modalidades del sistema educativo, para ello el Estado debe realizar todos los ajustes necesarios para lograr efectivamente los procesos de inclusión e integración de estas personas, de acuerdo a sus capacidades.

Es de insistir, el apoyo para que las personas con autismo, no se sientan discriminadas o desplazadas, por el contrario poner de relieve la necesidad de ayudar a mejorar las condiciones de vida de los infantes y adultos con autismo; ya que ellos, al igual que todos por igual y sin discriminación, tienen derecho a: la libre determinación, a la independencia y a la autonomía, así como a la educación y el empleo en igualdad de condiciones, debemos lograr su aceptación, soporte, inclusión y la defensa de sus derechos.

Por ello, más que una debida interpretación y aplicación de la novedosa ley, debemos los operadores tener una visión globalizada sobre los aspectos primordiales, a favor de la tolerancia y el respeto de las personas con autismo.

Sería importante, a los fines de una verdadera planificación legislativa, la ejecución de planes de inserción en áreas educativas donde existan temas culturales y formativos sobre el espectro, también circunscribir programas de formación a diversos sectores privados y públicos sobre temas de inclusión laboral a personas con autismo. Sin olvidar el aspecto de la Salud, donde se conjuguen la ciencia y se garantice la atención que requiere esta población.

Es necesario el compromiso de todos, a fin de promover encuentros de solidaridad, en acciones concretas de apoyo y una renovada promoción de esperanza teñida de azul, tenemos legislación vamos ahora por la inclusión.

Foto: Cortesía

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