DERECHO DE FAMILIA O FAMILIAS SIN DERECHOS

El próximo fin de semana comenzaremos a dictar un taller-diplomado de actualización sobre las nuevas tendencias del derecho de familia, como un aporte desde la ilustración sobre el debate de algunos de los desafíos que enfrenta la familia en la era post moderna, y la necesidad de encuadrar esta institución de carácter civil, bajo el amparo de la obligada perspectiva constitucional-internacional.

Son múltiples los retos y cambios que enfrenta el derecho de familia, uno de ellos referidos a la pluralidad de las familias, o la llamada democratización de las relaciones familiares, que se condensa en la noción de distintas formas de organización familiar, a la luz del reconocimiento del pluralismo que defiende la gama internacional de los derechos humanos.-

El principal duelo que enfrenta el derecho de familia, es por empezar a definir lo relacionado a la familia, pues teniendo en cuenta que ha dejado de ser, esencialmente, un núcleo económico y de reproducción, para ser un espacio de afecto y de amor, en este contexto, nuestra Constitución de 1999 utilizó el término “familias” que resalta su carácter plural, no existiendo un concepto nominal de familia, ya que las familias deben ser consideradas de acuerdo a su propia estructura, atendiendo sus especificidades.-

El papel de la familia ha variado, la tradicional familia nuclear, dos adultos de diferente sexo con sus hijos, ha mutado en el contexto social, vemos la familia monoparental, aquellos donde los hijos viven solo con uno de los padres, por ser soltero, viudo, o divorciado, también encontramos las familias ampliadas donde están los abuelos, tíos y primos integrados; otra tipología es la familia ensamblada, dos personas de diferente sexo, se unen en convivencia cada uno con sus hijos, y se suman a una gran familia; la familia sustituta, llámese colocación familiar o adopción; dando cabida la realidad social a las familias homoparentales, uniones maritales o de hecho formadas por personas del mismo sexo, para fines de convivencia y unión familiar, muchas de ellas no reguladas.

Para el estudio del derecho de familia, ha sido primordial el análisis de su principal objeto: la familia, el cual no puede ser abordado desde una sola concepción, por el contrario es un fenómeno social que tiene diversas aristas, biológico, psicológico, religioso, económico, científico, sociológico, legal entre otros, y que en conjunto va a depender de las relaciones de su propia composición, dinámica y voluntades.

Ahora bien, de esas relaciones de convivencia, dependen de gran medida el objeto del derecho familiar , entendido como el conjunto de normas e instituciones jurídicas que regulan las relaciones personales y patrimoniales de los miembros que integran la familia, allí derivan el matrimonio y sus variantes, las uniones estables de hecho, filiación, divorcio o disoluciones, comunidad de gananciales. Por ello es fundamental conocer su estudio y alcance, en virtud que las normas que rigen el derecho de familia regulan relaciones privadas en un orden público, no pueden adscribirse únicamente al ámbito público ni al privado, por eso hablamos de una perspectiva constitucional-internacional, por ello muchas de ellas reguladas, otras no establecidas en la legislación solo por vía jurisprudencial o doctrinal.

En este sentido, es oportuno preguntarse qué pasa en la realidad socio legal, con algunos ejemplos: ¿Qué ocurre con parejas del mismo sexo, para su constitución de familias tanto reproductivas como económicas; ¿Qué pasa cuando una persona está casada pero a su vez constituye otra familia y tiene una convivencia de hecho; ¿Cómo está regulado el derecho al divorcio; ¿Cómo están regulados los temas de filiación y las técnicas de reproducción humana, ¿Qué ocurre con las filiaciones de hecho. ¿Qué pasa con los acuerdos patrimoniales previos y posteriores al matrimonio, ¿existen estos últimos en las Uniones estables de hecho, en fin existen una serie de situaciones multifactoriales, en las que en efecto dominó, se encuentran vinculados derechos de la niñez y la adolescencia, y debemos como garantes del derecho de familia conocer y abordar.

Sabemos que la mayoría de las personas viven en familia, muchas veces sin conocer o pasearse por estos escenarios que se pueden derivar, porque en su estructura pesan más las relaciones de pareja y convivencia, pero de ellas descienden una gama de situaciones socio legales, que muchas veces no están ni reguladas en la legislación, y otras veces su regulación no es acorde con la realidad social, por ello el estudio del derecho de familia siempre está en una constante evolución, para no hacer del mismo un caos familiar.

Siendo entonces necesario en la actualidad para la sociedad desarrollar programas de difusión dirigidos a familias, docentes, abogados y público en general, donde a través de la enseñanza y la formación, se debata uno de los grandes retos que vive la sociedad, mantener la familia, sin importar su estructura y organización, como el pilar y base de toda humanidad. Educando se construye el futuro, @fundahousespica.-