La mañana de este viernes 19 de julio en la avenida Bolívar de Valera, familiares, amigos y miembros del Instituto de la Mujer del Estado Trujillo (IMET) y otros organismos públicos realizaron un pancartazo exigiendo justicia por la muerte de Génesis Ojeda, además de darle un mensaje a las mujeres que denuncien los casos de violencia de género ante las autoridades competentes.
Helen Barreto, coordinadora municipal para la mujer y la igualdad de género expresó que salen a la calle “una vez más apoyando a todas las mujeres que son víctimas de violencia de género, hoy no queremos más violencia, no queremos más feminicidios y hoy todas somos Génesis Ojeda”.
Los familiares de Génesis Ojeda piden justicia por su muerte, además desean que no siga pasando este tipo de situaciones y le aconsejan a las mujeres que estén viviendo una circunstancia como esta manifestárselo a sus familiares para buscar ayuda.
De igual manera, el Comandante de la Policía Nacional Bolivariana, Alí Chourio que se hizo presente para apoyar esta actividad y expresó que: “apoyamos la no violencia contra la mujer, no al maltrato, tenemos organismo de seguridad que estamos acá para defender a cada una de las mujeres, así que denuncia que nosotros estamos aquí para respaldarlas”.
Recordemos que la joven Génesis Ojeda fue víctima de feminicidio por parte de su ex pareja sentimental Marcos Montilla, el pasado martes 9 de julio en el sector El Bosque, municipio San Rafael de Carvajal.
Ojeda murió producto de las múltiples heridas ocasionados por Montilla con un objeto corto punzante.
El feminicidio se refiere al asesinato de una mujer por el hecho de serlo. El feminicidio hace parte de las múltiples y complejas violencias contra las mujeres, y no puede entenderse sólo como un asesinato individual, sino como la expresión máxima de esa violencia, en la que el sometimiento a los cuerpos de las mujeres y extinción de sus vidas tiene por objetivo mantener la discriminación y la subordinación de todas.
Según datos de la ONU, el feminicidio se ha convertido en una epidemia mundial a medida que los Estados incumplen su deber de proteger a las víctimas de la violencia de género.
"El feminicidio es una tragedia mundial de proporciones pandémicas", dijo Morris Tidball-Binz, relator especial sobre ejecuciones extrajudiciales, sumarias o arbitrarias.
"Cada año, decenas de miles de niñas y mujeres, incluidas mujeres trans, son asesinadas en todo el mundo a causa de su género y muchas más corren el riesgo de morir a causa de la violencia de género porque los Estados no cumplen con su deber de proteger eficazmente la vida de las víctimas y garantizar su seguridad", afirmó.
En su informe a la Asamblea General, Tidball-Binz afirmó que los asesinatos por razones de género constituyen una manifestación extrema y generalizada de las formas existentes de violencia machista. Como especialista forense, especificó normas y mejores prácticas para la investigación de los feminicidios con el fin de hacer frente a la impunidad, proporcionar justicia a las víctimas y sus familias, y contribuir a la prevención.
"Cientos de mujeres condenadas a muerte se enfrentan a la ejecución en muchos países como consecuencia de prácticas de enjuiciamiento y condena con sesgo de género", afirmó el experto.
Por ello, instó a los Estados a cumplir con sus obligaciones e intensificar los esfuerzos para investigar y erradicar los feminicidios y formuló recomendaciones basadas en las mejores prácticas.
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