Confirman muerte de las cinco personas que estaban en el sumergible “Titán”

El peor de los temores se ha cumplido, se acabó el tiempo. Poco después de cumplirse las 96 horas de oxígeno con las que contaba el sumergible "Titan", un vehículo operado por control remoto (ROV) localizaba escombros cerca de los restos del Titanic.

La Guardia Costera de Estados Unidos dijo en Twitter que se "ha descubierto un campo de escombros dentro del área de búsqueda cerca del Titanic", que se encuentra a una profundidad de unos 3.800 metros
Tras conocerse el hallazgo de estos restos, un amigo de dos de los tripulantes ha confirmado que son del submarino. En concretos han hallado "un marco de aterrizaje y una cubierta trasera del sumergible". Esto significaría que el submarino sufrió una grieta e implosionó bajo la presión del agua, matando instantáneamente a los cinco hombres a bordo, esta información la confirmó a última hora la guardia costera.

La Guardia Costera afirmó que encontraron partes que confirman una implosión del Titán, debido a la fuerte presión en el fondo del Atlantico Norte. Con esto se confirma el fallecimiento de todas las personas a bordo. La empresa Pelagic Research Services confirmó después a CNN que su vehículo operado por control remoto, que fue el primero en realizar una búsqueda del submarino, halló los restos.

Operativo sin precedentes

Para dar con los cinco tripulantes desaparecidos el domingo a 600km de la costa de Terranova, en Canadá, desplegó un dispositivo nacional e internacional con pocos precedentes. "Será un día crítico en esta misión de búsqueda y rescate", aseguraba Guillermo Sohnlein, que cofundó OceanGate y se fue de la compañía en 2013 En la superficie, cinco barcos dotados con sonares para detectar cualquier movimiento acústico rastrean los más de 20.000 kilómetros cuadrados que ocupa la zona de acción.

Mientras, la Marina Real canadiense envío un buque con equipos médicos y una cámara hiperbárica, una máquina cilíndrica individual que se utiliza para llevar oxígeno a los tejidos y mejorar la circulación de buceadores que se ven afectados por el rápido cambio de presión. Por aire, las aeronaves sobrevuelan la zona en busca de cualquier señal que arroje algo de información sobre el paradero de los cinco tripulantes que pagaron 230.000 euros para descender a 3.800 metros de profundidad y observar de cerca los restos del Titanic.

El Pentágono por su parte envió un C-130 Hércules (entre sus múltiples funciones está la de reconocimiento meteorológico y apoyo aéreo en misiones de socorro en caso de desastres naturales) y tres C-17 (un avión de carga muy flexible que puede transportar camillas y pacientes durante evacuaciones aeromédicas).

La empresa Horizon Maritime, propietaria del "Polar Prince" (la embarcación que lanzó el sumergible), también ha enviado un buque para buscar en las profundidades del océano. Bajo el agua, todo un despliegue de embarcaciones submarinas de última generación que pocas veces se han visto juntas, incluidos artefactos con control remoto que pueden sumergirse a mayor profundidad que un buzo humano.