Heridas no cicatrizadas

Estas heridas sangrientas que vienen de varias civilizaciones, de varias culturas y también de varias religiones, que desde hace siglos viven en las orillas del Mediterráneo; donde se dividen dos realidades y donde el destino y la frontera es un área conflictiva donde se contradice la tesis del final de la historia y del tiempo por un sistema donde unos llegan y otros mueren. En estos países es donde parece que lo malo es bueno; y lo peor y lo bueno se confunden.

Este escrito es dedicado a aquellos que guardan odio o resentimiento y a otros que deben observar que lo mejor de un país es su querencia, tanto de los ciudadanos como de sus emigrantes que por "x" razón llegan a convivir fuera de su patria y hogar; que deben procurar tener fe en Dios o creer en un Dios superior, poder convivir con afecto, amor, perdón para poder vivir en paz y no con odio.

En las cosas malas de la cuna cultural de la humanidad occidental es haber permitido que esta zona sea el área más conflictiva e importante del planeta.

Todas estas contradicciones, todos estos conflictos se condensan en esta área donde hay desigualdades económicas, explosión demográfica, guerras territoriales e inestabilidad política entre esas dos orillas mediterráneas.

El Mediterráneo está en crisis y esto gira en torno al conflicto Israel - Palestina, por la falta de respeto al derecho que es lo que más provoca esta violencia. No habrá paz en el Mediterráneo si no hay paz en el Oriente medio, y no habrá paz entre israelitas y palestinos si no hay el legítimo reconocimiento del derecho de los palestinos a establecer el estado de su elección en esa tierra Santa.

Todo esto es una tragedia porque Palestina e Israel no merecen una suerte así.
Desde hace tiempo y recientemente el mundo al ver esta situación conflictiva en Oriente, en China, en Rusia, etcétera, se viene notando que cada vez más personas se preocupan por el futuro; preocuparse puede ser una palabra no lo bastante intensa y para muchos de nosotros es poca, porque se tiene miedo.

Tenemos miedo del mundo tal como hoy lo conocemos, no existe un mañana donde el terrorismo no sienta piedad por matar o desmembrar niños ni ancianos.

Este escrito no se centra en el miedo, se debe centrar en la esperanza, la comprensión, la conducta; que lejos de educar moralicemos la aplicación de la ley religiosa que enseña el temor, la hipocresía frente a la fe y la irresponsabilidad como ciudadano.

Debemos crear conciencia ante un Dios que todos conocemos pero que nadie respeta. Amigos que leen este escrito en nuestro mundo convulsionado por la maldad, irrespeto, corrupción, asesinato, suicidio, terrorismo; es necesario que tomemos conciencia para alcanzar la paz en el mundo, sino sucumbiremos por no intentarlo.

La paz debe entenderse como un proceso basado en el desarrollo humano, individual o colectivo donde el orden social entre los pueblos y la persona se entienden suficientemente para no entrar en situaciones conflictivas.

La finalidad de todas estas observaciones es para que practiquemos la tolerancia, y a convivir en paz como buenos vecinos; y así unir fuerzas para el mantenimiento de la paz y seguridad internacional.
Amigos tengamos conciencia, la dictadura no es buena consejera, las violaciones de la Constitución no da mérito a ser mejor gobernante, el irrespetar las leyes y el derecho humano conlleva a un terrorismo personal y por más que el pueblo tenga una seguridad militar o no la tenga conlleva a violaciones de derechos en la paz y en la guerra; hoy estamos viendo miles de muertos, entre ellos, niños, jóvenes y adultos por un solo capricho, el poder, creando así un exterminio sin que poder alguno tenga la forma de contenerlo, esta tragedia como lo habrán notado no la interrumpe ni la OEA, ni la ONU, ni el poder religioso (El Papa), ni las organizaciones mundiales para la paz han podido hacer nada hasta hoy 01 de noviembre de 2023. Han masacrado a miles o por qué no millones de personas, ¿qué cree usted, es justo o es normal?; esto nos conlleva a la irracionalidad política, militar, religiosa y por qué no moral.

Recapacitemos, compartamos como personas racionales y no dudemos ya que tenemos a nuestro alrededor bajo un amor fraterno ante todo el mundo.